La marca personal. Algo fundamental hoy día

¿Cuántos sois los que habéis oído hablar de la marca personal?

Lo normal en estos últimos años es haberlo escuchado en infinidad de ocasiones, ya que es el resultado de una estrategia puesta en marcha por una persona y que quizás hoy día y más que nunca, es útil.

Orígenes del concepto

Antes de explicaros que es lo que es, en qué se diferencia del personal branding y cómo debemos poner en marcha una marca personal bien auténtica, me parece oportuno mencionar los orígenes de este término.

A finales de los noventa florecían las primeras preocupaciones por cómo destacar ante un proceso de selección o de trasladar en ¨tangible¨ aquellos factores interesantes y atractivos que aparecían en un currículum. Este artículo escrito por Tom Petters, uno de los fundadores de este término, es como una especie de biblia que a posteriori fue desarrollándose con el paso del tiempo.

La marca personal

La marca personal es el resultado de lo que eres, cuáles son los valores que guían tu comportamiento, las capacidades y habilidades que puedes destacar y en definitiva, todo aquello que forma parte de ti y hace diferenciarte de los demás. No hay que confundirlo con el branding personal que será explicado posteriormente.

¿Crees que nunca has hecho uso de tu marca personal y ni siquiera sabes qué es eso? Pues estás muy equivocado.

La marca personal constituye un pilar fundamental en todas las relaciones personales y profesionales de nuestro a día a día. Por poner dos ejemplos claros: tu jefe te contrató por tener algo distinto a los demás que participaron en el proceso de selección o tu pareja te quiere por aportarle aspectos que otra persona no logra hacer. A groso modo, todos hemos hecho uso de nuestra marca personal para conseguir un objetivo.

El branding personal

El branding personal el proceso previo a la marca personal, el poner a prueba el autoconocimiento, detectar qué factores pueden hacerte diferenciar del resto y en qué eres bueno. Este proceso no es rápido y ni mucho menos es fácil, ya que son muchas personas las que cometen el error de representarse con unos valores que en el fondo no les definen (fallo de autenticidad) o no encontrar algunos rasgos con el que diferenciarse claramente del resto (fallo en la búsqueda de cualidades).

Si alguna de estas dos alternativas se producen, verdaderamente no eres lo que dices o bien no aportas nada diferente, el proceso de branding y marca personal, en consecuencia, fracasa.

¿Cómo empiezo para construir mi marca personal?

Este pequeño decálogo considera aspectos que son fundamentales a seguir si queremos que nuestra marca personal sea conocida y valorada.

1. Lo primero sin duda es mentalizarse de que se trata de un proceso lento y que exige de constancia.
2. Un papel, un bolígrafo y a pensar qué es lo que haces bien. Todas las personas tenemos algo bueno. La dificultad en muchas ocasiones está en descubrirlo.
3. Definir el tono y mensaje que quieres transmitir en el proceso de marca personal.
4. Por donde vas a comunicar esos mensajes (artículos, foros, redes sociales…)
5. Organízate por fases y cuáles serán tus objetivos generales y específicos. Todo tiene un sentido y un fin.
6. Conoce a nueva gente y amplia tu red de contactos. El networking es muy poderoso.
7. Representar visualmente tu marca personal. No olvides que consiste en venderte como si fueras otro producto.
8. Mostrar tus conocimientos y habilidades al público. Si estos solucionan una necesidad, la gente lo agradecerá.
9. Siendo empático con los demás y plenamente consciente de no poder gustarle a todo el mundo.
10. Plantearte si existe la posibilidad de emprender algún proyecto especial.

En conclusión, y lo que debes ver, es que incluso nosotros mismos somos productos y tenemos que comunicar al mercado que es lo que nos hace peculiares y únicos para que nos ¨consuman¨.

Una buena marca personal te ayudará en la vida a conseguir por ejemplo, esa oportunidad profesional que estabas deseando desde hace mucho tiempo o estar con la chica que deseabas o tener unos amigos que valoran tus cualidades.

No debemos perder más el tiempo, todo lo contrario.

Ponernos manos a la obra para tener una alta reputación, ser influyentes y por qué no decirlo, un ejemplo a seguir para los demás.